Bizcocho relleno de avellanas con sabor a Saramago

Comenzó por hacer con barro una figura humana, de hombre o de mujer es pormenor sin importancia, la metió en el horno y atizó la lumbre suficiente. Pasado el tiempo que le pareció cierto, la sacó de allí, y, Dios mío, se le cayó el alma a los pies. La figura había salido negra retinta, nada parecida a la idea que tenía de lo que debería ser su hombre. Sin embargo, tal vez porque todavía estaba en comienzo de actividad, no tuvo valor para destruir el fallido producto de su inexperiencia. Le dio vida, se supone que con un coscorrón en la cabeza, y lo mandó por ahí. Volvió a moldear otra figura, la metió en el horno, pero esta vez tuvo la precaución de cautelarse con la lumbre. Lo consiguió, sí, pero demasiado, pues la figura apareció blanca como la más blanca de todas las cosas blancas. Aún no era lo que él quería. Con todo, pese al nuevo fallo, no perdió la paciencia...
Así es como Saramago nos explica la creación del hombre. No es teoría propia porque se basa en la leyenda sobre la creación del pueblo piel roja americano. A la vista de todos está, que mucho se ha especulado con qué le falló a dios cuando nos creó. Algunos catecismos apuntan a que dios está libre de causa porque la curpa culpita culpera del todo nuestra. Él nos hizo perfectos, a su imagen y semejanza y si hemos salido desmadrados eso es cosa de la figurita de barro y no del alfarero. De ese mismo modo pensaban los piel roja, convencidos también en la imposibilidad de imputar causa alguna a las dotes creativas del creador. Tampoco creían posible achacar defectos en el barro. Sencillamente, dios no tenía experiencia con el horno.
En el mundo había ya por tanto un negro y un blanco, pero el desgarbado creador todavía no había logrado la criatura que soñara. Se puso una vez más manos a la obra, otra figura humana ocupó lugar en el horno, el problema, incluso no existiendo todavía el pirómetro, debía ser fácil de solucionar a partir de aquí, es decir, el secreto era no calentar el horno ni de más ni de menos, ni tanto ni tan poco, y, por esta regla de tres, ahora será la buena. No lo fue. Es cierto que la nueva figura no salió negra, es cierto que no salió blanca, pero, oh cielos, salió amarilla. Otro cualquiera tal vez hubiese desistido, habría despachado aprisa un diluvio para acabar con el negro y el blanco, habría partido el cuello al amarillo, lo que se podría considerar como la conclusión lógica del pensamiento que le pasó por la mente en forma de pregunta, Si yo mismo no sé hacer un hombre capaz, cómo podré mañana pedirle cuentas de sus errores...
En el supuesto de que entonces hubiese por encima de este creador otro creador, es muy probable que del menor al mayor se hubiese elevado algo así como un ruego, una oración, una súplica, cualquier cosa del género, No me dejes quedar mal. En fin, con las manos ansiosas introdujo la figura de barro en el horno, después escogió con meticulosidad y pesó la cantidad de leña que le parecía conveniente, eliminó la verde y la demasiado seca, retiró una que ardía mal y sin gracia, añadió otra que daba una llama alegre, calculó con la aproximación posible el tiempo y la intensidad del calor, y, repitiendo la imploración, No me dejes quedar mal, acercó un fósforo al combustible. Nosotros, humanos de ahora, que hemos pasado por tantas situaciones de ansiedad, un examen difícil, una novia que faltó al encuentro, un hijo que se hizo esperar, un empleo que nos fue negado, podemos imaginar lo que este creador habrá sufrido mientras aguardaba el resultado de su cuarta tentativa.
Pero claro, los piel roja barrieron para casa. A medida que iban naciendo las distintas razas y dios juzgaba que no eran perfectas, se emperraba en crear la siguiente. No paró de intentarlo hasta que tuvo entre sus manos una figura roja, rosada, perfecta. Aquí se dio por contento y tras el consabido coscorrón, le buscó un bonito lugar donde vivir: América. Los rostros pálidos, desde luego, no pensaban lo mismo cuando se liaron a mamporros con los favoritos del gran Manitu hasta no dejar ni uno. El mundo está lleno de genocidios, de figuritas machacadas de puro odio o rabia o indiferencia y no puedo -ni quiero- evitar la ocasión y preguntar a este creador, que lo mismo tenía otro creador que a la vez fue creado en un horno por otro creador... pues yo le pregunto; ¿y por qué caramba no aprendiste a hornear antes de meterte en semejante berenjenal?

Si me hubieras preguntado mi humilde opinión -siempre en el supuesto de que yo hubiera existido por aquel mundo pre-creación- en cualquier caso, te hubiera dicho lo que siempre me dijo a mí mi madre: que para cocer lo que sea y como sea, siempre ha de ser al amor de la lumbre, siempre con mil ojos encima y siempre con cariño y paciencia. La cocina, o la creación, es lo que tiene.

El bizcocho salió perfecto, un color dorado apetecible, deseable. Mi impaciencia, mis  ansias de llegar al momento foto con luz suficiente antes de que terminara de atardecer, hizo que al desmoldarlo se rompiera. Estaba aún caliente y le di el coscorrón demasiado pronto.
Nota sobre las citas de Saramago:
Son extractos del libro la caverna, muy recomendable como todo lo de este señor tan majo.

Nota sobre cómo salir al paso con un bizcocho roto recién horneado:
Debes actuar con mucha calma pero con celeridad para que no se enfríe demasiado. Forra el mismo molde con papel de aluminio y deja bastante sobrante para poder envolverlo. Introduce los trozos a modo rompecabezas y una vez que cada miga está en su lugar lo envuelves bien. Déjalo así unas cuantas horas y casi seguro que, a pesar de las cicatrices, se dejará comer lozano y entero. Más o menos.



Ingredientes: 
  • 70gr. de mantequilla ablandada 
  • 140gr. de azúcar 
  • 1 pizca de vainilla molida 
  • 1 poco de ralladura de limón 
  • 250gr. de harina repostera 
  • 1 cucharadita de polvo para hornear 
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato de soda 
  • 225ml. de suero de mantequilla o yogur

  • 100gr. de avellanas o mitad y mitad con almendras 
  • 40gr. de azúcar
  •  1 cucharada de miel 
  • 1/2 cucharada de canela en polvo


Preparación:
  1. Precalienta el horno a 180ºC. Por un lado hacemos la masa de avellanas. Pon en la trituradora las avellanas, el azúcar, la miel y la canela. Hacemos una masa y reservamos. 
  2. En un bol amplio, mezcla la mantequilla muy blanda con el azúcar hasta tener una crema más o menos lisa. Añade la vainilla, la ralladura y el suero de mantequilla (o yogur en su defecto). Por otro lado, mezcla el harina con los polvos de hornear y el bicarbonato. Lo añades a la crema anterior y lo bates con unas varillas hasta que la masa esté completamente lisa y sin grumos.
  3. En un molde alargado -previamente engrasado y protegido con papel- pon una capa de masa de bizcocho. Extiende por encima un capa ligera del relleno de avellanas. Pon otra capa de masa y de nuevo relleno. Finalmente, cubre con el resto de la masa de bizcocho. Hornea hasta que veas que el centro está cuajado (pincha con un palillo para comprobarlo).


Quiero cerrar este post ofreciéndote esta opción tan original de Adeli del Dulce Paladar. Ella suele cerrar sus post, ofreciendo una segunda receta por aquello de que los glotones no se queden con hambre ;-) bromas aparte, sigo su ejemplo y te dejo link a este bizcocho de chocolate con solo dos ingredientes.
 

Si te ha gustado, comparte o imprime:

44 comentarios

  1. Por mucha información que tengamos, la historia del principio de la humanidad siempre atrae de una manera u otra...
    Y el bizcocho está para comérselo todo y no dejar miga.
    Saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días Alba!
      Los misterios de la vida siempre nos seducen y nuestras ansias por el conocimiento hacen que inventemos historias maravillosas:-) un beso

      Eliminar
  2. Me parece muy bueno y me quedo con tu receta.Besos

    ResponderEliminar
  3. Un bizcocho riquísimo, un relato maravilloso!

    ResponderEliminar
  4. Hola guapa, tu bizcocho buenísimo y la pinta impresionante.
    Y el nombre que le has puesto, me gusta. La caverna es un libro muy bueno,crítico con el consumismo y descriptivo a más no poder de cómo el más grande acaba con el más pequeño. A mí me gusta mucho otro de sus libros:Todos los nombres. Tuve la suerte de cruzármelo dos veces a este señor, y la última vez me armé de valor y le dí las gracias por los buenos ratos que me había hecho pasar con su lectura, me sonrió y me dijo que el placer era el suyo por oír esas palabras. Todo un señor y con la cabeza muy bien amueblada. Estuve en su casa hace unos meses, que ahora se puede visitar ¿sabes como se llama? " A casa" curioso nombre. Paro ya, que me embalo.
    Buen truco para reconstruir los rotos, a mí tampoco me gusta hacer fotos con luz si no es natural, aunque algunas veces no queda otra.
    Besotes, mi niña.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Querida Núria! no pares! no! cuenta! y sus ojos? cuentan tantas cosas como parece? sabiendo lo que ahora sabemos, desde que empecé la caverna sentí esa pena, esa congoja de lo que hemos perdido, el amor del artesano por lo que hacía y que el ansia del poderoso le dejó sin trabajo, sin futuro... un día, no sé cuando pero un día no hace mucho, dejamos la puerta abierta al arrogante, al desalmado y preferimos comprarle a él sus miserias en lugar de seguir disfrutando de esos cántaros que con tanto amor las amas de casa abrazaban en sus regazos...

      Y ahora por mucho que busquemos a los Ciprianos que había en cada pueblo, en cada barrio, ya no los encontramos nunca... y nos lamentamos por haber sido tan tontos,

      Besos

      Eliminar
  5. Mira que nos traes cosas ricas, ricas, pero con el placer que da leerte, ¡¡no haría falta para que una venga encantada a visitarte!! :P

    Además, me he reído un montón al leer el título, porque mis primeros acercamientos a él fueron horribles, dos o tres libros los dejé a medias. Hasta que llegué a Viaje a Portugal y a Caín, y entonces ya me conquistó. Me obligó una amiga, que sabía lo que hacía. Que por cierto, también cree que el de la caverna es muy recomendable :P

    Si me hubieran servido con un bizcocho como este mi primer Saramago, ¡¡seguro que me lo hubiera comido entero!! El libro también, ¡digo!

    Y oye, a quién no se le rompe un bizcocho al desmoldarlo?? A mí me fastidia cuando lo he hecho en un molde bonito, ¡qué rabia! ¿Usas el más complicado de fregar y encima queda feo?

    Otra manzanita de amor para vosotros, y feliz finde!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Paula,

      A mí Saramago siempre me ha despertado mucha emoción. Estoy tardando mucho en terminar este libro porque creo que no quiero llegar. Me voy a morir de tristeza porque desde el principio uno sabe como terminará todo porque es la vida misma... Mi primer Saramago llegó un poco tarde, fue casi recién llegada a Austria y lo hice con el viaje del elefante.. una simpatía tremenda me despertó este animal porque ambos habíamos emprendido un viaje a lo desconocido...

      Romper bizcochos por falta de paciencia es lo más normal del mundo. Por eso adjunto el truco de la reeconstrucción porque no hay que rendirse al primer desmoronamiento:-)

      Besos

      Eliminar
  6. pedazo historia ni la conocia, cuando e visto lo de saramago no sabia que era, me estrañaba lo de un bizcocho con un ingrediente asi, aunque bueno mejor uno de avellanas y no carnivoro

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues tienes que leer algo de él. Aunque te recomiendo que evites sus libros "duros", tan reales en sus crudezas que te dejan el alma por los pies,

      BEsos

      Eliminar
  7. Buenos días guapa mía! llévate todo cuanto quieras:-) disfruta mucho! BEsos

    ResponderEliminar
  8. Si es que a quién se le ocurre ponerse a moldear y cocer a seres humanos sin tener experiencia en el horno... A mí me fascina cómo los muy religiosos achacan cualquier mal al propio hombre, mientras que todo lo bueno es gracias al Señor....

    Saramago es uno de los autores favoritos de mi padre, a ver cuándo le robo sus libros y me pongo en serio con toda su obra :).

    Bizcocho, avellanas... dos de mis palabras favoritas juntas! No me importaría tomar un segundo desayuno con un buen pedazo ahora.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues creo que solo a dios porque no conozco mujer que a la hora de parir, a la que empuja, hornee magdalenas. Pues ya disfrutarás si empiezas a tirar de los libros de tu padre, es muy recomendable leer a este hombre,

      Besos

      Eliminar
  9. Rotos o enteros lo importante es que esté ricos y el tuyo se ve muy pero que muy bueno
    Besos desde nuestra patria, que he venido a Barcelona a visitar a la family

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Aisha! Ehhh, en suelo patrio! a ver que tal llevas ahora eso de celebrar la parte gore de la pascua y resurección del pupilo del alfarero. Yo un año más, me quedo a poner huevitos en el jardín y a hornear panes dulces:-)
      Besos

      Eliminar
  10. jajajajajajaj.... me has hecho reír... hace un par de días vi una foto de uno que vendía figuritas de nazareno y ponía en inglés que no eran el KKK.... la verdad es que sí, que un poco gore es el tema de la semana santa
    de momento para no darte mucha envidia, te diré que está nublado ;)
    besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajajaja! me cachis! tan asimilado lo tenemos y tan acostumbrados a ver gente flagelándose y sufriendo así a lo tonto que no nos damos cuenta de lo raro que suena a un mortal cualquiera:-P

      Por cierto, tu día nublado me da envidia,
      +besos

      Eliminar
  11. increíble bizcocho! quién decía que los bizcochos eran aburridos???

    acabo de descubrir tu blog y ha ido directo a mis favoitos! qué montón de recetas tan estupendas que tienes! (ya sé que hacer con mis reservas de coco! jajajja) me hago seguidora!

    un abrazo!
    Laura

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues quién diga eso es porque ha horneado pocos porque anda que no hay color y sabor donde elegir:-) un placer conocerte LAura! besos

      Eliminar
  12. Esta entrada es como la vida misma Mai... ¡eres una artista!. Este corazón verde que tiene tu peque en las manos ¿qué es?. Un besote y un abrazote,

    www.cocinaamiga.com

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ese es un corazón de madera que lleva rondando por casa un par de navidades. Lo compré para hacer un centro de mesa y Lucas se lo adjudicó. Así que desde entonces es de la familia y ronda por mi cocina como Pedro por su casa:-)

      Besos guapa y como siempre un placer!

      Eliminar
  13. guauuuuuuuuuuuu, querida Mai, mi Mai, pensé que te ocurría algo pues desde que pase por aquí hace ya casi un mes cuando mi cumpleblog, no había vuelto a saber nada de ti (perdón, de tu blog) ya que no me llegan tus nuevas entradas, como si no publicaras nada. por dios, todo lo que me he perdido y que historias y recetas. perdóname preciosa. un abrazo y copio cocina con este libro. muakkkkkkkkkkkkkkkkk

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues cosas así creo que nos están pasando a todos. No se actualizan las listas de blogs así que nos perdemos la mitad de las fiestas:-) lo bueno es que todo queda escrito y guardado por lo tanto, el roto no es tan grande,

      Un besazo guapa!

      Eliminar
    2. claro que no, pero me apena perderme justo cuando publicas, nada mas, lo unico bueno: así tengo mas lectura pendiente, jejeje. me ha gustado tu forma de arreglar el bizcocho que se ha abierto por desmoldarlo en caliente, yo después de varias veces he descubierto que si le pongo encima peso durante su reposo, después queda incluso mejor que si no se hubiera roto. un besazo para toda la familia. muakkkkkkkkkkk.

      Eliminar
  14. Nota sobre tu simpática receta: nunca se me habría ocurrido mezclar Saramago y plumcake casero, pero bienvenido sea. Feliz Semana Santa :)
    Saludos desde Waterbridge.

    -Andy-

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días Andy,

      Realmente no comprendo como mi retorcida mente llega a tomar estas decisiones. Con el tiempo he aprendido a dejarla hacer, y luego ya se verá a donde llegamos... en esta ocasión, conducida por las letras de Saramago he arribado en las palabras de mi madre "niña, siempre al amor de la lumbre" algo que en mi vida he oído de otras personas pero nunca con la dulzura que lo expresaba mi madre... imagino que el recuerdo juega estas pasadas pero me he preguntado muchas veces a quién rememoraba cuando decía estas palabras.. a su madre? creo que no, se lo hubiera oído decir a mi abuela.. a su abuela? puede ser. En cualquier caso, ya no lo puedo saber así que este consejo suyo estará siempre bañado por un almíbar a secreto...y de ahí a un bizcocho roto que salió bellísimo del horno? este pensamiento hace que la cabeza vuele en mil y un teorías :-)

      Felices Pascuas!

      Eliminar
  15. MI queridísima Mai, que guapo Lucas con ese corazoncito, parece una manzanita con forma de Amor, es precioso, el Lucas y el corazón, jeee, que en cualquier caso son la misma cosa.
    MI contacto con Saramago es hasta la pag 10 de Viaje a Lisboa y algo mas creo, me pillo en una época muuu rarilla, solo me gustaban los libros que versaban sobre política, hachazo al corrupto ¡¡ y cosas así y fijate que esos libros no me ha servido de nada mas que para pillar berrinches ¡¡¡.
    Ahora mientras leía lo del cocinero tan poco mañoso, pensaba la de cosas bonitas que podía haber leído. Tiene remedio ir al pasillo y comenzar a buscar sus libros para volver a ejercitar el celebro y pensar.Siempre he pensado que alguien o algo nos tuvo que poner aqui, y que ese creador ni es tan superfantastico ni nosotros somos tan supermalos, eso es una incógnita que no se si quiero llegar a conocer. Nunca me han gustado los fariseos, los rechazo de plano y esta época de Semana Santa es una Semana farisea donde las haya y de ostentación, demasiada y gusta y mucho viendo esos reportajes en la TV de miles y miles de personas esperando a que pasen ...esos tronos cargados de ....bueno no sigo que luego se sabe todo. Son sentimientos encontrados los que tengo que ni y misma me los aclaro.
    Ahhh ¡¡¡í que ese bizcocho me suena a gloria terrenal y el truqi que das me lo anoto que yo soy muy manazas para esas cosas y muy exceptiva para las otras, a mis 52 años estoy viviendo una revolución interior ¡¡¡ esperemos que me de tiempo a resolverla, antes de que llegue a la ancianidad ¡¡¡ Lucha entre lo que te metieron a fuego en al cabeza y lucha con los nuevos conocimientos que he ido adquiriendo con al experiencia de vivir. Cuantas cosas por hacer aun ¡¡¡¡ no se si tendré tiempo de tanto como quiero hacer y el tiempo que queda.
    Pues anoche llovió y no sabes como ¡¡¡
    Bsss desde Almeria.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buenos días mi querida Lolica!

      Me has hecho pensar mucho y ya sabes que peligroso es eso de darme carrete... intentaré ser escueta...

      A mí tampoco me gustan los hipócritas. Respeto cualquier idea, cualquier creencia pero como tú, a estos, los rechazo de plano. Quiero pensar que mucha gente no sabe que lo está siendo. No todo el mundo es capaz de montar revoluciones internas y desear ser mejor, más sensato, vivir mejor amueblado... España es y será el imperio de Torquemada, el paraíso del Tribunal del Santo Oficio que hizo de las suyas hasta bien entrado el siglo 19. Y esto en un país de fiesteros, porque anda que no nos gusta la fiesta y la pandereta así que la mejor manera de festejar sin que la inquisición te llevara por delante era con Dios, Jesús y la Virgen al frente... con Franco, nos pasó igual. Las fiestas paganas estaban prohibidas así que había que sacar al cristo y a la Virgen, rezar un poquillo a la que ibas de romería y terminar con una verbena popular en la ermita del santo del lugar... hay que entender que entonces no había tele, cines pocos y la gente necesitaba divertirse de vez en cuando para olvidarse de las durezas de diario, de las estrecheces y qué caramba! que los mozos y las mozas tenían que echarse el ojo porque nadie quería en casa una hija para vestir santos o un varón que por falta de matrimonio se le tachara de afemina'o ...

      Pero eso es agua pasada que ya no mueve molinos. Habría que interiorizar mejor qué significan esos pasos en las calles, dejar a un ladito el toque a lo Torquemada con flagelaciones y maltratos auto-infligidos ... menos numeritos a lo beatos para luego vivir el resto del año sin comulgar con la fe que cuando la multitud se agolpa hace que se rasguen vestiduras y ruedan lágrimas... ojalá que un día seamos capaces de dejar la parafernalia del "devoto" y comencemos a celebrar más las Pascua y todo lo que ello conlleva de amor y esperanza y sobre todo, ser un poco más solidarios, caritativos y más coherentes con las creencias que profesamos... o dejamos de profesar que una cosa no tiene que andar -ni anda- atada a la otra.

      Ea! he dicho! vaya tela con el rollo que tengo!

      Termino animándote a que sigas con tu revolución, que es positiva, que tienes que lograr que todo lo que has vivido y experimentado tenga sentido para ti misma y para los tuyos... llega un momento que necesitamos ser "auténticos" por encima de lo visto y oído:-)

      Te quiero mucho!

      Eliminar
  16. Delicioso
    Me has dado una idea estupenda para las avellanas que andan por casa, antes de que enrancien
    Me encanta ver como cada pueblo tiene una idea diferente sobre la creacion del hombre...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola en la Luna, tengo publicadas unas trenzas de pan rellenas con este mismo relleno. Hay muchas maneras de darle buen uso a esas avellanas que no se merecen vivir de rancias:-)

      Besos

      Eliminar
  17. Muy bueno tu consejo... mira que empezar la creación sin haber practicado! Ahora me explico porque le salió todo tan regular, claro, creó y creó hasta que se cansó y adiós muy buenas, eso tampoco puede ser...
    Casi no se cree que ese bizcocho se haya roto, se le ve bien... me punto tu consejo que a veces voy como loca y también me pasa.
    Estoy sorteando un libro muy chulo en el blog, comida y humor, buena pareja, apúntate si te gusta y que haya suerte!
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo mismo no se dió cuenta que la estaba liando parda, que no se pueden hacer hombres y hombres así a lo tonto. Y eso del coscorrón, creo que a cada uno le dió uno con distinta intensidad y así nos ha ido, cada cual hablando una lengua. Si hubiera sido más cuidadoso hablaríamos todos igual y aquí servidora se ahorraría los disgustos que se lleva con el alemán... en fin, cosas de la creación,

      Pues hay que participar porque esta entrada y tu concurso me lo tomo como una señal,
      Besos

      Eliminar
  18. Ay si Maite ser auténticos y sin miedo a rechazar según que cosas que parece que nos hayan metido...sin pedir permiso ni naa de naa...y como le pasa a Lola yo también he tenido y todavía tengo estas luchas entre lo que yo siento y quiero y lo que te han inculcado....pero es tener agallas y ser fiel con uno mismo....y que digan lo que quieran o piensen o.....
    El bizcocho pa comerselo tooo enterito....dale un besazo a Lucas que esta cada día mas guapo...un besote

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Núria,
      se lo daré de tu parte y nosotras, pues como Lola a revolucionarnos una pizca:-)
      Besos

      Eliminar
  19. Hoy con la empanada mental que tengo no me veo capaz de filosofar (uff, y que me da pereza, aunque esté feo decirlo), si te digo la verdad, así que directamente me voy al pan, mejor dicho, al bizcocho, que se ve estupendo, ¡y con lo que nos gustan las avellanas en casa!
    Un beso, guapa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Marhya, qué dios me libre de obligar a filosofar a nadie que yo pongo la letra para quién la quiera pero no la impongo,
      Besos

      Eliminar
  20. Que receta tan estupenda Mai, cuando he leído el título, he pensado ¿un ingrediente que se llame Saramago?,¡no daba crédito!, ahora lo entiendo, ja, ja,ja...el bizcocho ya está en mi carpeta de pendientes, y a pesar de ser una devoradora de libros, todavía no he leído nada de Saramago, creo que siguiendo tu recomendación cuando termine el último que estoy leyendo, buscaré alguno de este autor a ver que tal. Muchos besos guapa

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Calandrita!
      jajajaja! uhm.. Saramago en salsa! no suena mal, como ingrediente también promete:-)
      Besos

      Eliminar
  21. Hola bonita!!
    Ando bastante perdida y la verdad sin muchas ganas de nada pero llevo acordándome de ti a cada momento y ya no he querido dejar pasar ni un día más sin comentarte.
    Cómo estás? Has encontrado ya un homeópata? Cuenta,cuenta!
    Yo tengo pedida cita pero parece ser que hay mucha demanda y hasta el 14 de Mayo no me han dado,este al que voy a ir tiene fama de ser muy bueno y eso espero porque estos malditos dolores me tienen muy limitada y aunque yo suelo ser muy optimista,también tengo mis momentos de bajón.
    Como se te ocurre ponerme delante de las narices ese maravilloso bizcocho,ainss,que me tienen a dieta y mato por algo dulce,pero da igual,yo me lo guardo para un día que peque.
    Por cierto,nunca he leído a Saramago pero a mi hijo mayor le encanta y se "bebe" sus libros.

    Un enorme abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Carmen, cariño! qué desconectada que estoy! y mira que llevaba tiempo para escribir a mi lista de amores y dar señales de vida y en ella me había escrito un "Da un toque a Carmen a ver como está"... y mira, siempre te adelantas...

      Pues voy en buen camino. El jueves visito un centro de terapias alternativas. No creo que haga nada allí porque es carisísimo para mi bolsillo pero es a través de una amiga así que voy en busca de ideas y cosas que pueda hacer o buscar... ya te contaré. Al tiempo, cambié de médico de cabecera. Nos lo habían recomendado por tirar mucho de tratamientos homeopáticos y sobre todo en cosas crónicas así que le llamamos y le contamos nuestra historia. Nos ha aceptado -gracias a dios- porque parece que ya no cogía nuevos pacientes porque tiene la consulta saturada así que me lo tomo como un regalo de esta vida. Vaya, como una suerte enorme...

      De entrada dice que no vamos a dar nada por supuesto porque puede que tenga otros factores de verbena por mi body serrano.. o no, y que en cualquier caso hay que saberlo. Cachis! suena a super competente este hombre verdad?

      Un beso guapa y te escribo para que me cuentes tú como vas:-)

      Eliminar
  22. Eres la repera, como enlazas un texto de Saramago con este estupendo bizcocho, porque tu si que sabes hornear, no como ese Dios, que no dio una, jajaa!!
    La impaciencia ya se sabe, es algo que tenemos las almas inquietas, esa jiribilla que no te deja estar parada ni un momento, pero nada que ver con saber o no hornear, yo prefiero pensar que eso nos mantiene estupendas!!
    Cuantos bizcochos no se me habrán roto por lo mismo, pero oye, lo buenísimos que están y además vas pellizcando todos esas migajitas tan ricas que andan por ahí desperdigadas!!!
    Me parece genial la solución que nos das, no se me había ocurrido y seguro que más de una vez la pondré en práctica!!
    Ya te escribo a ver que tal el nuevo doctor!!
    Mil besos hermosa!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Teresa guapa, nosotras tenemos lo que a dios le faltó: experiencia pero ya ves que ni con toda la experiencia del mundo soy capaz de calmar esta impaciencia por la foto rápida:-P Ahhh pero como dices! lo importante es que somos culetes inquietos, siempre maquinando e ideando, de aquí para allá y así estamos de guapas y de lozanas:-D

      sí, te contaré que estoy encantadsíma. A ver que resulta que parece que el reuma no ha avanzado y puede que se a otra cosa... lo mío parece un cápitulo de Emergencias:-P
      Besos

      Eliminar

 
Copyright © Hierbas y especias. Diseñado con por Las Cosas de Maite